Portada

Internacionales, Portada

“Chalecos amarillos”: la peculiaridad de lo francés

Fuente: Atilio Borón | Atilioboron.com.ar Fecha: 14 de DIC 2018 Alemania y Japón tienen el dudoso honor de ser dos países en los que jamás triunfó una revolución. No por casualidad fueron también los que, precisamente a causa de ello, dieron nacimiento a  regímenes tan oprobiosos como el nazismo y el militarismo fascista japonés. Por contraposición la historia francesa está signada por recurrentes revoluciones y levantamientos populares. Aparte de la Gran Revolución de 1789 hubo estallidos revolucionarios en 1830, otro mucho más vigoroso en 1848 y la gloriosa Comuna de París de 1871, el primer gobierno de la clase obrera en la historia universal. Luego de su sangriento aplastamiento pareció que la rebeldía del pueblo francés se había apagado para siempre. Pero no fue así. Reapareció en la heroica  resistencia a la ocupación alemana durante la Segunda Guerra Mundial y luego, con una fuerza arrolladora, en el Mayo francés de 1968. ¿Es esto lo único que hace de Francia un país tan peculiar? No. Más importante que este incesante fermento insurreccional que históricamente distingue a las capas populares francesas es que sus luchas resuenan como ninguna otra en la escena mundial. Ya lo había advertido Karl Marx en 1848 cuando, observando la revolución en Francia, dijera que “el canto del gallo galo despertará una vez más a Europa”. Y la despertó, aunque esos sueños fueron aplastados a sangre y fuego. Miremos la historia: la Revolución Francesa retumbó en Europa y América, con fuerza atronadora; la Comuna se convirtió en una fuente de inspiración para el movimiento obrero mundial, sus enseñanzas reverberando inclusive en algunos rincones apartados de Asia. El Mayo francés se reproduciría, con las lógicas características nacionales, por todo el mundo. En otras palabras: Francia tiene esa única capacidad de convertir lo suyo en un acontecimiento histórico-universal, como gustaba decir a Hegel. Y esa es, precisamente, la inimitable peculiaridad de lo francés. La rebelión de los “chalecos amarillos” que comenzó hace pocas semanas cuando dos camioneros y la dueña de un pequeño comercio -desconocidas entre sí y habitando en distintos lugares del interior de Francia- lanzaron a través de las redes sociales una convocatoria a protestar en las rotondas de entrada de sus pequeñas ciudades por el aumento del precio del combustible. A los pocos días una de ellas tenía casi un millón de seguidores en su cuenta de Facebook. Luego vino la convocatoria del 17 de Noviembre en París y, a partir de allí, la protesta adquiriría una dimensión fenomenal que puso al gobierno de Macron entre la espada y la pared. Lo que no habían podido hacer en tres meses los sindicatos del ferrocarril lo lograron los “chalecos amarillos” en pocas semanas. Y la cosa sigue, y el “contagio” del virus rebelde que llega desde Francia ya se vislumbra más allá de sus fronteras. Se ha insinuado en Bélgica, Holanda y ahora en Polonia, con ocasión de la Cumbre del Clima en Katowice. En Egipto el régimen de Al Sisi prohibió la venta de chalecos amarillos en todo el país como una medida precautoria para evitar que el ejemplo francés cunda en su país. La revuelta, de final abierto, no es sólo por el precio del combustible. Es una protesta difusa pero generalizada y de composición social muy heterogénea contra la Francia de los ricos y que en cuya abigarrada agenda de reivindicaciones se perciben los contornos de un programa no sólo pos sino claramente anti-neoliberal. Pero hay también otros contenidos que remiten a una cosmovisión más tradicional de una  Francia blanca, cristiana y nacionalista. Ese heteróclito conjunto de reivindicaciones, inorgánicamente expresadas, alberga demandas múltiples y contradictorias aspiraciones producto de una súbita e inesperada eclosión de activismo espontaneísta, carente de dirección política. Esto es un grave problema porque toda esa enorme energía social liberada en las calles de Francia podría tanto dar lugar a conquistas revolucionarias como naufragar en un remate reaccionario. Sin embargo, más allá de la incertidumbre sobre el curso futuro de la movilización popular y la inevitable complejidad ideológica presente en todos los grandes movimientos espontáneos de masas no caben dudas de que su sola existencia ha socavado la continuidad de la hegemonía neoliberal en Francia y la estabilidad del gobierno de Emmanuel Macron. Y en un mundo de superpoblado de esperpentos como los Trumps y los Bolsonaros, los Macris y los Macrones todo esto es una buena noticia porque el “canto del gallo galo” bien podría despertar la rebeldía dormida –o premeditadamente anestesiada- de los pueblos dentro y fuera de Europa y convertirse en la chispa que incendie la reseca llanura en que las políticas neoliberales han convertido a nuestras sociedades, víctimas de un silencioso pero mortífero holocausto social de inéditas proporciones. No es la primera vez que los franceses desempeñan esa función de vanguardia en la escena universal y su ardorosa lucha podría convertirse, sobre todo en los suburbios del imperio, en el disparador de una oleada de levantamientos populares –como ocurriera principalmente con la Revolución Francesa y el Mayo de 1968- en contra de un sistema, el capitalismo, y una política, el neoliberalismo, cuyos nefastos resultados son harto conocidos. No sabemos si tal cosa habrá de ocurrir, si el temido “contagio” finalmente se producirá, pero los indicios del generalizado repudio a gobiernos que sólo enriquecen a los ricos y expolian a los pobres son inocultables en todo el mundo. No habrá que esperar mucho tiempo pues pronto la historia dictará su inapelable veredicto. Más allá de sus efectos globales la brisa que viene de Francia es oportuna y estimulante en momentos en que tantos intelectuales y publicistas de Latinoamérica, Europa y Estados Unidos se regodean hablando del “fin del ciclo progresista” en Nuestra América, que supuestamente sería seguido por el comienzo de otro de signo “neoliberal” o conservador que sólo lo pronostican quienes quieren convencer a los pueblos que no hay alternativas de recambio y que es esto, el capitalismo, o el caos, ocultando con malicia que el capitalismo es el caos en su máxima expresión. Por eso los acontecimientos en Francia ofrecen un

Internacionales, Medio Oriente, Portada

El flujo del dinero evangélico hacia Cisjordania

Fuente: Judy Maltz | Haaretz Fecha: 14 de DIC 2018 Una investigación de Haaretz revela que los grupos cristianos han invertido hasta 65 millones de dólares en proyectos en el «Corazón Bíblico» durante la última década. Eso no incluye los servicios que ofrecen de forma gratuita, como trabajadores voluntarios. Cuando los primeros voluntarios evangélicos cristianos llegaron a la colonia religiosa de Har Bracha en Cisjordania hace unos 10 años, para colaborar con los granjeros judíos locales en la cosecha de uvas de forma gratuita, no todos los recibieron con los brazos abiertos. Después de todo, durante generaciones se les había enseñado a los judíos que cuando los cristianos se esfuerzan por ser amables, es probable que estén planeando en secreto para convertirlos y, por lo tanto, es mejor mantener una distancia. Mucho ha cambiado desde entonces. Todavía hay colonos judíos que no están completamente cómodos con la idea de que los cristianos vivan entre ellos mientras trabajan en sus campos, pero en estos días están más calmados. Hayovel, la organización estadounidense que los lleva a Har Bracha, se encuentra entre una creciente lista de grupos evangélicos que operan exclusivamente bajo el llamado del «corazón bíblico». Durante la última década, ha llevado a más de 1.700 voluntarios a las colonias, y solo dentro de las colonias, porque, en principio, sus voluntarios no asisten a los agricultores dentro de Israel propiamente dicho. Al explicar el apego especial de la organización a este terreno en disputa, que la mayoría de la comunidad internacional no reconoce como parte de Israel, Hayovel declara en su sitio web: «Todos los países del mundo han dado la espalda a Judea y Samaria, el corazón de Israel, donde el 80 por ciento de la Biblia fue escrita u ocurrieron los hechos. Hubo muchos años en los que Hayovel operó fuera del radar, ocultando a Israel lo que estaban haciendo creyendo que cuanto menos supieran los israelíes, mejor. No más. En estos días, la organización sin fines de lucro está más que feliz de recibir a periodistas y curiosos en su campus principal, ubicado en esta colonias que domina la gran ciudad palestina de Nablus. Su complacencia de estar tan por encima de la legitimidad es una prueba de cómo se han convertido las interacciones entre los evangélicos cristianos y los colonos judíos. El Israel “real” El Corazón de Israel (también conocido como Fundación Binyamin) es otra organización sin fines de lucro que se beneficia de estos lazos. Establecida hace tres años, la organización recauda cientos de miles de dólares anuales para proyectos específicos en las colonias, según su fundador el estadounidense, Aaron Katsof. Aunque Katsof dice que los evangélicos no representan la mayor parte del dinero que recauda, ​​sí representan la gran mayoría de sus donantes. «Tienes que darte cuenta de que mientras el judío promedio da 1.500 dólares, el cristiano promedio da 50», dice. «Pero su participación está creciendo muy rápido». Cuando le preguntaron qué lo impulsó a establecer esta nueva organización de recaudación de fondos, Katsof, que vive en la colonia de Shiloh en Cisjordania, respondió: “Cuantos más evangélicos conocí a lo largo de los años, más me di cuenta de cuánta sed tenían para conectarse con las colonias. Cuando aterrizan en Tel Aviv, a menudo me dicen que no es así como se imaginaban Israel. Pero cuando vienen aquí a las colonias, dicen que esto es exactamente como se lo imaginaron. Son nuestros aliados más grandes, más grandes, más grandes, más grandes», agrega. La suya no es la única organización que intenta conducir esta oleada de apoyo evangélico al movimiento de los colonos a dólares y centavos. Pero estimar el alcance de esta asistencia financiera es difícil, ya que las organizaciones sin fines de lucro y las iglesias registradas en los Estados Unidos no están obligadas a revelar sus fuentes de financiamiento ni a especificar adónde va el dinero. Además, parte de esta organización benéfica adopta formas no monetarias, como horas de trabajo gratis (en el caso de Hayovel) o servicios gratuitos de marketing y ventas. Un informe de 2015 de Molad, un lobby israelí por la renovación de la democracia israelí, trató de estimar la cantidad de dinero que la comunidad evangélica invierte en las colonias. Llegó a la conclusión de que era prácticamente imposible, entre otras razones porque «muchas de las ONG israelíes activas en Judea y Samaria no respetan completamente las reglas de transparencia y no informan al Registrador de las ONG, en violación de la ley». No obstante, el informe concluyó que una «parte considerable» de toda la inversión evangélica en Israel termina más allá de la Línea Verde (las fronteras de Israel antes de 1967) y que los beneficiarios incluyen consejos regionales, ONG de derecha, puestos ilegales, negocios y viajes de empresas especializadas en viajes de asentamiento. Una revisión de los estados financieros de las principales organizaciones activas en la recaudación de fondos de los evangélicos para el proyecto de asentamiento indica que las cifras aún son relativamente pequeñas en términos absolutos. Pero parecen estar creciendo. También parece que más y más de estas iniciativas están echando raíces. A menudo, la mejor manera de determinar si dichas organizaciones están dirigiendo sus esfuerzos de recaudación de fondos a los evangélicos, a diferencia de los judíos, es mirar el lenguaje utilizado en sus lanzamientos de campañas de recaudación de fondos (muchos de los cuales aparecen en sus sitios web). Cuando se usa la palabra «Dios», a diferencia de «Hashem«, la audiencia es muy probable que sea cristiana. Así también, si el término «Biblia» es preferido sobre «Torá» y «Corazón Bíblico» en vez de «Judea y Samaria». Otro engaño es el uso de la frase «cumplimiento de la profecía bíblica» cuando se explica el significado de tales donaciones. Es una frase ampliamente conocida para ganar los corazones y abrir los bolsillos de los evangélicos. Basándose en esta revisión, así como en los informes de los medios de comunicación sobre proyectos específicos, Haaretz estima que la cantidad total de fondos recaudados en los últimos 10 años es de entre 50 y 65 millones de dólares. El

Nacionales, Opinion, Portada

Rita Segato: «El feminismo punitivista puede hacer caer por tierra una gran cantidad de conquistas»

Fuente: Camila Alfie | Ag. Paco Urondo Fecha: 12 de DIC 2018 En la Argentina, como lo demostró ayer Thelma Fardin, las mujeres ya no nos callamos más. Contra el acoso, la violencia y la justicia patriarcal, el escrache, ya sea anónimo o con nombre y apellido, se posicionó como un dispositivo para alertar de posibles violentos, pero también como una búsqueda de ajusticiamiento mediante la condena social. A través de este método, que virtualmente está en manos de todos y todas, hemos visto caer desde ídolos rockeros hasta actores -Juan Darthés, el último-, docentes prestigiosos, cuadros políticos de organizaciones y partidos, todo tipo de “ciudadanos de a pie”. Sin embargo, dispara interrogantes que todavía no parecen saldados: ¿Podemos ponerlo en duda? ¿Puede el punitivismo, frente a la impunidad, ser una forma de “justicia popular”? Este fin de semana se celebró en La Plata la cuarta edición del Encuentro Latinoamericano de Feminismos, donde la antropóloga Rita Segato junto la periodista e integrante de HIJOS Lucía García Itzigsohn, entre otras invitadas, debatieron acerca de estas cuestiones en la rueda “Seguimos persiguiendo justicia —  Homenaje a Chicha Mariani”. En conjunto, abordaron cuestiones como la búsqueda de una reparación, el significado de la memoria, y repasaron la historia del escrache como método de lucha; sin embargo, la charla terminó con más interrogantes que respuestas. Itzigsohn, que contó su experiencia como hija de detenidos desaparecidos, sostuvo que estas acciones surgieron “como una instancia de justicia en acto, perfomática”. “Hoy estoy en otra posición, la vía institucional es importante porque inscribe las cosas en otro nivel”, señala, y recuerda: “Nosotros hacíamos una investigación copiada de las Abuelas. Íbamos a las casas y hacíamos guardia, trabajábamos con los vecinos, les contábamos que íbamos a marcar ese domicilio”, previo al momento de la icónica bombita roja. “Era un momento festivo”, con murga incluida: “Bailábamos, porque podíamos transformar la impunidad en algo que poníamos en la discusión social. Era una catarsis colectiva”. Si hay o no reparación, Itzigsohn define que la violencia es justamente “lo irreparable”; sin embargo, poder sanar colectivamente y vivir desde el cuerpo que lo que le había pasado a ella también lo atravesaron otros, le permitió “una línea de fuga del lugar de víctima”. Para la antropóloga Rita Segato, el “bien colateral” de la dictadura fue justamente eso: escenas como la de los escraches, que promocionaron el debate para desarrollar así una inteligencia social “más sofisticada”, que permitió “salir de los lugares comunes”, y promovió que las mujeres profundicen “una nueva forma de hacer política”, que reafirma: “Surgió con las Madres”. Por eso, para ella, los homicidios de Berta Cáceres y de Azucena Villaflor fueron femicidios; aunque muchos hombres fueron asesinados por las mismas causas, señala que la diferencia radica en que lo que se quería matar “era un estilo de hacer política, una politicidad propia de las mujeres”. Sin embargo, menciona que estos métodos usados en el período de post-dictadura “nunca fueron un linchamiento”, sino el fruto de “un convenio colectivo a través del cual concluyeron que había que llegar a un castigo”: aunque no hubo una instancia judicial, sí hubo una de “juicio justo”. Por eso reconoce que “desde el feminismo podría haber una instancia de juicio justo”, -en vez de las escraches como se los conoce ahora, –“como una asamblea, para que la situación no sea un linchamiento sin sumario”. “Si defendemos el derecho al proceso de justicia, nuestro movimiento no puede proceder de esa forma que ha condenado”. Para ella, la impunidad radica en que ahora es exhibida como un show, como en el caso de Lucía Pérez, donde se le dijo a la gente que “el mundo tiene dueños”, y que ellos “no van a ceder ante ningún pedido de la sociedad”: hay un “mensaje de la dueñidad”, donde lo que queda en claro es que “la institucionalidad” es una ficción. “Entonces, ¿qué es lo contrario a la impunidad? ¿El punitivismo?”, se pregunta Rita. Sabiendo que estaba entrando en un terreno complicado, invitó a salir “de los binomios mas paridos, como el abolicionismo o el regulacionismo, que simplifican la realidad”. Y agregó: “No quiero un feminismo del enemigo, porque la política del enemigo es lo que construye el fascismo. Para hacer política, tenemos que ser mayores que eso”. “Antes de ser feminista soy pluralista, quiero un mundo sin hegemonía. Lo no negociable es el aborto y la lucha contra los monopolios que consideran que hay una única forma del bien, de la justicia, de la verdad: eso es mi antagonista”, describió. Para la investigadora, “el feminismo punitivista puede hacer caer por tierra una gran cantidad de conquistas”, es “un mal sobre el que tenemos que reflexionar más”, y recuerda la violencia que se vive en las prisiones: “¿Puede un estado con las cárceles que tiene hacer justicia? Esa no puede ser la justicia; ser justo con una mano y ser cruel con la otra”. Profundizando este concepto, la antropóloga expuso que hay que tener “cuidado con las formas que aprendimos de hacer justicia” desde lo punitivo, que están ligadas a la lógica patriarcal. El desarrollo del feminismo, recalca, no puede “pasar por la repetición de los modelos masculinos”. Frente a eso, sabe que la respuesta no es fácil: “No hay una solución simple, pero es necesario pensar más y estar en un proceso constante. Cuando el proceso se cierra, es decir, cuando la vida se cierra, se llega a lo inerte”, en cambio, “la política en clave femenina es otra cosa, es movimiento”. Además, señaló que “la única forma de reparar las subjetividades dañadas de la víctima y el agresor es la política, porque la política es colectivizarte y vincular”, propuso Segato. “Cuando salimos de la subjetividad podemos ver un daño colectivo”, y eso no puede curarse “si no se ve el sufrimiento en el otro”. Por eso, considera clave el proceso de debate y búsqueda de justicia: “Fuimos capturadas por la idea mercantil de la justicia institucional como producto y eso hay que deshacerlo. Perseguimos la sentencia como una cosa, y no nos dimos

Nacionales, Politica, Portada

Papel de reparto

Fuente: Adrián Murano | Revista Zoom Fecha 10 de DIC 2018 La Argentina gobernada por Mauricio Macri acaba de dar otro paso hacia la supresión de voces. El pasado jueves 6 de diciembre, en sesiones extraordinarias, el proyecto de ley que desregula la producción y la venta de Papel Prensa fue aprobado por la Cámara Diputados con 127 votos a favor, 66 en contra, 3 abstenciones y 60 ausencias. El interbloque oficialista en pleno (compuesto por radicales, Coalición Cívica y PRO) contó con el respaldo de diputados de los bloques Justicialistas y el Frente Renovador para despachar el último deseo del Grupo Clarín, mandamás de la firma. Si bien ese grupo ya votó en conjunto en beneficio de fondos buitres y otras corporaciones, con ese acto se institucionalizó como el “Grupo C”. El trámite exprés se había iniciado a principios de noviembre, cuando de modo furtivo, diputados de casi todas las bancadas estamparon su firma en el dictamen del proyecto de ley que cumple el último deseo de la papelera, la histórica herramienta de extorsión, sumisión y supresión de la libertad de expresión que la dictadura le entregó a Clarín y La Nación. En las formas, la iniciativa fue de Cooppal, una distribuidora que opera como subsidiaria de Papel Prensa. La solicitud fue dirigida al presidente de la Cámara baja, el renunciante serial Emilio Monzó, quien logró que otro peronista satélite, ubicuo y ambicioso impulse la iniciativa: el ex titular del Anses, Diego Bossio. El diputado rubricó el proyecto que propone, en su artículo 1°, derogar los artículos 20, 21, 24, 25, 26, 27, 40 y 41 de la ley. El segundo artículo es de forma. Con esa escueta redacción se desmonta una ley clave para la libertad de expresión: la que garantiza el acceso igualitario de todos los medios gráficos al papel, mediante la regulación de su producción y precio. El primero de los artículos que se propone derogar, por caso, obliga a que las empresas fabricantes, distribuidoras y comercializadoras de pasta de celulosa y papel para diarios fijen un precio único de pago al contado. La desregulación da libertad a Papel Prensa (la única proveedora activa de ese insumo en el país) a establecer valores según los intereses de sus principales accionistas -Clarín y La Nación-, quienes podrán pagar un monto distinto al de sus competidores. Concluido el trámite en comisión, el Ejecutivo incluyó el proyecto en sesiones extraordinarias, la cuales, se supone, están reservadas para leyes de relevancia pública de necesidad y urgencia. No parece ser el caso. Salvo,parece, para los accionistas privados de la papelera, en especial para Clarín, el multimedio más potente e influyente de la Argentina. ¿Cuánto habrá pesado la inminente campaña electoral en los diputados de convalidaron -con el voto o con la ausencia- el último deseo del Gran Diario Argentino? Ya se sabe: para el político promedio argentino, la necesidad de vidriera mediática tiene cara de hereje. El Grupo C En el recinto, el encargado de defender la iniciativa fue Bossio, quien chapuceó explicaciones acerca de la necesidad urgente de derogar los artículos. En su alegato, el ex titular de la Anses minimizó el impacto de la crisis en los medios gráficos y adjudicó culpas por la crisis que ya atraviesas los periódicos impresos a la tecnología. “La situación económica está afectando a los medios gráficos, puede ser. Pero más los está afectando el cambio tecnológico”, improvisó. Desde el comienzo, la justificación de Bossio transitó por la banquina. En defensa de los deseos de Clarín, incluso, llegó a cuestionar la necesidad de la propia existencia de los medios gráficos porque (el presidente de Brasil, Jair) “Bolsonaro ganó por las redes sociales”. Los argumentos contrarios llegaron desde la banca del Frente para la Victoria y del Frente de Izquierda. El cordobés Pablo Carro resumió: “Están derogando el artículo que establece de que todos tienen que pagar el mismo precio por el mismo papel. Lo que hacen es volver a la situación previa cuando Papel Prensa ponía precio diferencial y el hecho de obligar a tener stock cuando hay demanda”. Por su parte, el diputado del FIT, Nicolás del Caño, metió cuchara en el tema de fondo: “El proyecto es un regalo de fin de año para el Grupo Clarín, ya que contrasta con la situación del resto de los trabajadores”. Graciela Camaño (Frente Renovador) buscó despegarse de la mancha venenosa: “Nosotros no tenemos intereses oscuros. Nosotros no gobernamos, a nosotros Clarín no nos tiene que pedir nada y nosotros no le debemos ningún favor”. Resulta curioso que haya sido precisamente Camaño quien ensayara esa gambeta. Su marido, Luis Barrionuevo, admitió hace tres años que en la previa de las elecciones de 2015 realizó operaciones de prensa en los medios del Grupo (vía Jorge Lanata), para perjudicar al entonces gobierno K. Por entonces, Camaño ya trabajaba en la candidatura de Sergio Massa, quien cumplió con el cometido de juntar votos para impedir el triunfo en primera vuelta de Daniel Scioli, el candidato oficialista, que por ese drenaje quedó a menos de un punto de acceder a la presidencia. Camaño hoy sigue cerca de Massa, y es una de las que más impulsa al tigrense para que el próximo año se presente en la contienda presidencial. Otro que trabaja con ese objetivo es Bossio, que se presenta como Jefe de Campaña del ex intendente de Tigre. ¿Hay vínculo directo entre la posible candidatura de Massa y el nuevo favor a Clarín? En estas cosas no hay documentos firmados, pero ya se sabe: son pocos los candidatos dispuestos a pelearse con el principal multimedios de la Argentina en los albores de una elección. Y Massa, está claro, no está entre ellos. No es el único. La sesión del jueves dejó en evidencia que superados el impulso emancipador de la era cristinista, buena parte de la política argentina recobró el pánico por el multimedios. Eso explica por qué, además de los que votaron a favor, otro lote convalidó la iniciativa con su ausencia. En el Congreso,

Estados Unidos, Internacionales, Portada

Las elecciones de medio término en Estados Unidos

Fuente: Dardo Esterovich | Convergencia Fecha: 05 de DIC 2018 ¿Voto judío o voto demócrata de estadounidenses judíos? Las elecciones de medio término realizada en EE. UU. fueron consideradas como un plebiscito de la controversial gestión de Trump. Por eso las expectativas estaban centradas en un rechazo o una aprobación clara del electorado. Esto no sucedió o por lo menos no es tan evidente. Si se analiza los resultados desde el punto de vista numérico hay que prestar atención a la elección de Representantes ya que fue la única que abarcó todo el territorio estadounidense. Se renovó en su totalidad la Cámara de representantes, 435 curules. Los demócrata obtuvieron 232 escaños (la mayoría se obtiene con 218) contra 198 de los republicanos, recuperando la Cámara que hacía 8 años estaba en poder de los republicanos. En cantidad de votos los demócratas a nivel nacional obtuvieron 58.990.609 (53.1%) votos contra 50.304.975 8 (45.2%) de los republicanos, una diferencia algo más de 8.6 millones de votos (7.9%). Esta clara y contundente victoria demócrata en la Cámara de Representantes no se pudo repetir en el Senado donde los republicanos conservaron la mayoría e incluso la ampliaron en un par de escaños. Para el Senado la elección abarcó una extensión territorial más limitada ya que se renovó un tercio de sus miembros, 35 asientos de los 100. La elección era más difícil para los demócratas ya que debían renovar 26 mandatos de los 35 en juego. Los republicanos renovaron todos sus puestos mientras que los demócratas no lo consiguieron, lo que permitió que los republicanos ampliaran el estrecho margen de un voto que tenían en el Senado a cuatro (52 a 48). Al lograr retener el senado, los republicanos conservaron una importante cuota de poder. No se produjo la ola azul –color distintivo de los demócratas- que muchos pronosticaban. Si bien los republicanos terminaron debilitados, retuvieron para las definiciones de la política doméstica e internacional el suficiente poder aunque más limitado. y tendrán que negociar con los demócratas sobre muchos temas de significativa importancia. Mientras que Trump pudo unificar detrás suyo a los sectores del Partido Republicano que les fueron reacios en las presidenciales, los demócratas llegaron a estas elecciones sin haber podido cerrar totalmente la crisis interna producto de la derrota en las presidenciales del 2016, sin que aparezca un líder presidenciable para el 2020. Muchos de los candidatos a Representantes electos cuestionan el aparato partidario demócrata y son más afines a la corriente que lidera el senador Bernie Sanders. Las mujeres tuvieron un rol fundamental en la resistencia a Trump y obtuvieron un inédito número de representantes –más de 100- , aumentando dramáticamente las no blancas que se presentaron como progresistas y algunas como socialistas. Negras, morenas musulmanas, africanas, lesbianas, indígenas y otras minorías estigmatizadas ganaron sus elecciones: la neoyorquina Alexandria Ocasio-Cortez, la dirigente negra de Massachusetts Ayanna Pressley, las dos primeras legisladoras musulmanas, Rashida Tlaib de Michigan y Ilhan Omar de Minnesota; y las dos primeras congresistas indígenas, Deborah Haaland de Nuevo México y Sharice Davids de Kansas. Tanto la latina Ocasio-Cortez como Tlaib son miembros del grupo Socialistas Democráticos de America. Hubo también elecciones para gobernador en 36 estados. Los republicanos ganaron 20 y los demócratas 16, pero 7 estados cambiaron de mando a favor de los demócratas. Se rompieron muchas otras barreras invisibles este martes. El primer gobernador abiertamente homosexual del país salió elegido en Colorado: Jared Polis, de origen judío. Los demócratas lograron importantes victorias en Michigan y Wisconsin, zonas del cinturón industrial denominado Rust Belt (cinturón oxidado) que en 2016 votaron por Trump. Es interesante analizar las encuestas a boca de urna, tan difundidas en EE.UU. Tomaremos las realizadas por la cadena de televisión NBC News y la de CNN entre la población en general y la encomendada por JSteet para la población estadounidense que se asume como judía. Se utilizó un cuestionario muy amplio que se segmentan en diferente categorías con preguntas que se vienen repitiendo en su mayoría para cada elección. No se consideraron los votos para pequeños partidos, por lo que la suma de los porcentajes no alcanza al 100%. Tomaremos las categorías más relevantes. En el padrón masculino (48% de total) los republicanos ganan 51% a 47% y en el femenino (52% del total) los demócratas ganan 59% a 40%. Trump sigue conservando fielmente el voto masculino blanco mientras que la oposición de las mujeres a Trump, por sus declaraciones misóginas, ha sido determinante en el triunfo de los demócratas. Los jóvenes también eligieron a los demócratas: de 18 a 45 años (35% del padrón) por 61% a 36% y los de 45 años y más (65% del padrón) se dividieron casi por partes iguales, 49% demócratas, 50% republicanos. Por raza, entre los bancos (72% del padrón) ganan los republicanos 54% a 44% mientras que entre los afroamericanos, hispanos, asiáticos y otros (28% del padrón) triunfan los demócratas 76% a 22%. Por educación, con universitaria completa (41% del padrón) gana los demócratas 59% a 39%, y entre los que tienen universitaria no completa (59% del padrón%) empatan 49% a 49%. Los de mayor nivel de educación prefieren a los demócratas. Por ingresos, debajo de los u$s 50.000 (38% del padrón) ganan los demócratas 59% 38%, entre u$s 50.000 y u$s 99.999 (29% del padrón) ganan los demócratas 52% a 47% y por encima de u$s 100.000 (33% del padrón) ganan los republicanos 52% a 47%. La población de menores ingresos prefieren a los demócratas. Voto por religión: Protestantes y otros cristianos (47% del padrón) ganan los republicanos 56% a 42%. Católicos (26% del padrón) demócratas 50% republicanos 49%. Judíos (2% del padrón) ganan los demócratas con más amplitud que los de otras religiones 79% a 17%. Otras religiones (8% del padrón) ganan los demócratas 73% a 35%. Ninguna religión (17% del padrón) gana los demócratas 70% a 28%. Sorprende el número de quienes declararon no profesar ninguna religión en un país donde los templos de todas las religiones, no solo son lugares

Nacionales, Opinion, Portada

El chantaje moral

Fuente: Horacio Lutzky | Convergencia Fecha: 05 de DIC 2018 La imputación ligera de “nazismo”, frecuentemente indebida y malintencionada para descalificar adversarios políticos, o la banalización del Holocausto -la masacre planificada e industrializada de seis millones de hombres, mujeres y niños por su sola condición de judíos- distorsionan la memoria histórica. Y al igualarlo todo, neutralizan los reflejos defensivos que debe mantener en alto un sistema democrático ante reales amenazas latentes, que aguardan el momento de levantar su cabeza criminal nuevamente. A esas amenazas se refirió la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner en su discurso en Ferro, en el marco del foro de Pensamiento Crítico organizado por CLACSO. Aludió a “algunos Hitler modernos que acusan a los inmigrantes de tener la culpa de que no haya trabajo”. Y agregó que “la culpa por la falta de trabajo, fábricas y comercios que se cierran, debe buscarse no en los inmigrantes sino en las políticas públicas que se han implementado”. “Cuando se agota la argumentación del capitalismo en algunos sociedades comienzan a surgir los movimientos de extrema derecha que tratan de explicar los problemas encontrando culpables”, planteó Cristina luego de comparar esos discursos con los relatos sobre los que se montaron el nazismo y el fascismo en la Europa de la preguerra, y con el actual crecimiento de movimientos de extrema derecha en distintos países. Huelga señalar que no es CFK la única analista o dirigente en advertir sobre la peligrosidad de los renovados discursos de exclusión y estigmatización de pobres e inmigrantes, y en recordar su utilización en los años 30 y 40 por el nacionalsocialismo en su camino al totalitarismo. Sin embargo, esta mención motivó un inmediato y durísimo comunicado de repudio por parte de la Organización Sionista Argentina, que imputa a la senadora banalizar la Shoá “de un modo inaudito e inaceptable” por usar la expresión “Hitler modernos” para señalar políticas que condenan cruelmente a millones, prescindiendo el comunicado de contemplar el marco conceptual del planteo de Cristina, y descontextualizándolo. De tal modo, puede decirse que quien en verdad banaliza el recuerdo de la Shoá es la propia entidad judía, que sacraliza ciertos términos como si no hubieran sido un producto humano que se dio en un contexto económico y social, “prohibiendo” su utilización como advertencia ante movimientos que pudieran propiciar alguna forma de resurgimiento de sistemas genocidas. Bien entendido, en eso consiste el “Nunca Más”. El camino a la Shoá no comenzó con Auschwitz, sino muchos años antes, con las primeras medidas discriminatorias y persecutorias. Es de lamentar el uso políticamente sesgado y oportunista, y la indignación selectiva que desde hace años evidencian las autodenominadas “entidades centrales de la comunidad judía” respecto de estas cuestiones, a tono con el grado de simbiosis desarrollado con el gobierno de Macri. Así por ejemplo se vio cuando la DAIA difundió en julio de 2016 un comunicado de repudio al periodista Víctor Hugo Morales. La nota fue firmada por el negociador de dispensas por ofensas negacionistas (Ariel Cohen Sabban) y por un entonces funcionario del gobierno de Macri que ejercía al mismo tiempo como Secretario General de la DAIA (o funcionario de la DAIA que ejercía al mismo tiempo un cargo público directivo, designado por el rabino Sergio Bergman en el gobierno de Macri), el Dr. Santiago Kaplún. ¿Qué fue lo que motivó la indignada reacción?: el periodista había tenido la descabellada ocurrencia de señalar que “AMIA y DAIA se han convertido en nidos políticos del PRO”, y que “están en línea con sectores de la sociedad” que “terminaron entrando nazis en la Casa Rosada”. Esto último hacía referencia a que en Casa Rosada fueron recibidos oficialmente jóvenes militantes de un partido neonazi liderado por el führer criollo Biondini (hecho luego agravado con el adoctrinamiento efectuado por sus integrantes en un colegio público de la provincia de Buenos Aires). La DAIA no emitió por ninguno de los dos hechos comunicado alguno de repudio que pudiera incomodar al PRO y entendió que a cualquiera le puede pasar que se le metan militantes neonazis en una reunión oficial. O que, días después, integrantes de esa banda den clases en un colegio que depende de la más importante gobernadora del PRO, María Eugenia Vidal. ¿Pero que un periodista critique a la DAIA, diciendo que está alineada al PRO, eso sí que es grave? Rápido de reflejos (como en sus tiempos de arquero en Atlanta), el ex vicepresidente de DAIA y diputado por el PRO Waldo Wolff salió entonces del área tratando de “ridículo” y de “precariedad intelectual” a Víctor Hugo Morales. ¿A quién se le puede ocurrir sostener que la DAIA y el PRO actúan en yunta? Luego, y como era de esperar, se activó el REPUDIÓMETRO DE LA DAIA, haciendo llegar a todos los medios el comunicado rechazando estas expresiones periodísticas “que carecen de toda relación con la realidad”. Por esos días, el conducto de repudios se atascó con comunicados contra opositores al PRO (contra el actor Gerardo Romano, el político Agustín Rossi, Víctor Hugo), y no permitió fluir mensajes de denuncia respecto de la minimización oficial del accionar de neonazis declarados. En cambio, si un “intelectual orgánico” del macrismo taxativamente proclama que el kirchnerismo es lo mismo que el nazismo y “la Cámpora” es como las SS, no es para escandalizarse. En los últimos tiempos así lo hizo el ex actor cómico y hoy alterado referente de Cambiemos Alfredo Casero. Pero antes, lo hizo el escritor macrista Marcos Aguinis en una columna para el diario “La Nación” publicada el 21 de agosto de 2012 (El veneno de la épica kirchnerista) donde expresó: “Las fuerzas (¿paramilitares?) de Milagro Sala provocaron analogías con las Juventudes Hitlerianas. Estas últimas, sin embargo, por asesinas y despreciables que hayan sido, luchaban por un ideal absurdo pero ideal al fin, como la raza superior y otras locuras. Los actuales paramilitares kirchneristas, y La Cámpora, y El Evita, y Tupac Amaru, y otras fórmulas igualmente confusas, en cambio, han estructurado una corporación que milita para ganar un sueldo

Internacionales, Medio Oriente, Portada

La diplomacia de Netanyahu: comprar amigos vendiendo armas

Fuente: Akiva Eldar* | Al-Monitor Fecha: 29 de NOV 2018   «Esta visita refleja el status creciente de Israel entre las naciones», anunció festivamente el Primer Ministro Benjamin Netanyahu al informar a su Gabinete el 25 de noviembre sobre la «visita histórica» que el Presidente de Chad, Idriss Deby, estaba por comenzar en Israel. Al día siguiente, Netanyahu recibió al presidente checo Milos Zeman, quien bromeó diciendo que, al no ser un dictador, no podía comprometerse a trasladar la embajada de su país de Tel Aviv a Jerusalén, como Israel espera, pero hará lo mejor que pueda. Esta semana también nos informaron sobre un romance diplomático tras bambalinas entre Netanyahu y el gobernante de Sudán, Omar al-Bashir, para quien hay una orden pendiente de arresto internacional por crímenes de lesa humanidad y crímenes de guerra. Las publicaciones sobre contactos entre Jerusalén y Jartum sugieren que ha llegado el momento de que este dictador africano reconozca estos vínculos. En otras palabras, se le solicita que le pague a Israel con dinero diplomático por la campaña de relaciones públicas que realizó en nombre de Sudán en Washington. Y así, mientras Israel ofrece servicios diplomáticos a Sudán (turbios), también ofrece otros servicios (armas) a otros regímenes. No fue una coincidencia que Idriss Deby dijera en Jerusalén: «Tenemos una lucha compartida … contra el mal agobiante de este siglo, que es el terrorismo». Una investigación publicada el 19 de octubre en Haaretz, basada en unas 100 fuentes en 15 estados, reveló que uno de los síntomas del flagelo al que se refirió Deby es el uso que hacen los déspotas de todo el mundo del software espía israelí para monitorear sus rivales políticos y activistas de derechos humanos. Son, en otras palabras más gentiles, las que Netanyahu mismo usó esta semana: «Cada semana vemos la implementación de nuestro concepto, de cultivar la fuerza económico-tecnológica junto con la fuerza de inteligencia para la seguridad,  para recibir la fuerza político-diplomática». La concepción de Netanyahu es que exportar armamento y armas cibernéticas a los dictadores, además de realizar campañas de relaciones públicas en su nombre, equivale a visitas altamente publicitadas que le otorgan un plus de relaciones públicas. Según el método de Netanyahu, a cambio de la tecnología militar israelí, puede obtener una excelente exposición de los medios. En su ecuación, no hay espacio para la ocupación de Israel de Cisjordania y sus asentamientos, ni para el congelamiento diplomático con los palestinos. La victoriosa trompeta que anuncia la reciente visita de Netanyahu a Omán, su visita de julio de 2017 a Budapest y su entusiasta recepción de los líderes de Chad y la República Checa en Jerusalén ilustran las habilidades únicas de Netanyahu. Él es el único que puede realizar todas las siguientes hazañas al mismo tiempo: cultivar el emprendimiento de los asentamientos y perpetuar medio siglo de ocupación israelí, destruir el proceso diplomático, cultivar los vínculos de Israel con Europa y romper el boicot del mundo árabe-musulmán. Esta no es la primera vez, ni obviamente la última, que Netanyahu ha contado con el corto espacio de memoria del público. Él mismo, como joven viceministro de Relaciones Exteriores, fue miembro de la delegación de Israel en la conferencia de paz convocada en Madrid en octubre de 1991, con la participación de una docena de estados árabes. En un discurso pronunciado dos años después, el jefe del equipo de paz de Estados Unidos, Dennis Ross, dijo que en la conferencia de Madrid fue donde «nació el contacto y el rico y variado tapiz de relaciones entre Israel y los estados árabes» (cita tomada de « The Road to Peace Crosses Madrid «, del ex director del Ministerio de Asuntos Exteriores, Eytan Ben-Tsur). El evento internacional también abrió las puertas, para Israel de dos superpotencias, Rusia y China y allanó el camino para lazos diplomáticos plenos con India y Corea del Sur. Netanyahu confía en el hecho de que muy pocas personas conocen la Asociación Euromediterránea, también conocida como Proceso de Barcelona, que celebró su 23º aniversario del 27 al 28 de noviembre. Ehud Barak, entonces ministro de Relaciones Exteriores en el gobierno de Shimon Peres, firmó la iniciativa, que fue la base del primer acuerdo de libre comercio de Israel. El acuerdo, que resultó en la eliminación gradual de todos los aranceles sobre bienes industriales comercializados entre Israel y la Unión Europea, fue uno de los frutos dulces del Acuerdo de Oslo de 1993 entre Israel y los palestinos. Además de Israel, otros miembros del Proceso de Barcelona fueron Argelia, Túnez, Turquía, Jordania, Líbano, Malta, Egipto, Marruecos, Siria, Chipre y la Autoridad Palestina, con Libia como observador. La visión de los autores de la iniciativa era convertir a la región mediterránea en un área de paz mediante el fortalecimiento de la estabilidad y el fomento del desarrollo económico regional. El acuerdo de asociación de 1995 entre Israel y Europa sigue vigente, a pesar del hecho de que los gobiernos de derecha de Israel se han centrado principalmente en fomentar el desarrollo económico de los asentamientos judíos al otro lado de la Línea Verde. Evidentemente, la Unión Europea no habría firmado tal acuerdo si Netanyahu gobernara a Israel en ese momento, un gobierno que persigue a las organizaciones de derechos humanos que reciben fondos de la UE. De no ser por el Acuerdo de Oslo de 1993, cuyos arquitectos fueron blanco de una violenta incitación instigada por Netanyahu, entre otros, Jordania no habría firmado en 1994 un tratado de paz con Israel o no habría abierto una embajada en Ramat Gan. Es lógico que si Netanyahu hubiera estado en el poder en ese momento, junto con sus ministros de gabinete de línea dura Naftali Bennett y Ayelet Shaked, Israel no hubiera podido abrir misiones diplomáticas en los estados del Golfo Pérsico, y Arabia Saudita y Bahrein no se habrían  retirado del acuerdo de boicot árabe en 2004 y 2005. Netanyahu se basa en el hecho de que solo un puñado de israelíes recuerdan la Conferencia de Annapolis celebrada hace 11 años,

America Latina, Internacionales, Portada

La gran protesta de López Obrador

Fuente: Arleen Rodríguez Derivet | CubaDebate Fecha: 02 DIC 2018 Eso de llamar protesta a la toma de posesión, dicen que quedó definitivamente establecido en la cultura política mexicana desde el siglo XIX, con el surgimiento del estado laico. Una vez separado el poder ejecutivo de la Iglesia, se dejó de jurar sobre la Biblia y empezó a levantarse la mano. Ya no se juraba, se protestaba. Desde entonces, nadie en México lo llama de otra manera. Acaso el pueblo azteca, tan creativo y singular para nombrar las cosas, también lo bautizó así a la espera de un día histórico como este primero de diciembre de 2018, cuando Andrés Manuel López Obrador protestó absolutamente, como no lo había hecho jamás un elegido para la primera magistratura del país, al menos en las últimas cuatro décadas. Sonó muy enojado el nuevo Presidente mexicano al referirse a ese periodo -él mismo fijó las fechas- de la tristemente célebre era neoliberal que le robó las riquezas y las virtudes al país. “Lo digo con realismo y sin prejuicios ideológicos: ha sido un desastre, una calamidad para la vida pública del país”, afirmó. Y dijo más: “La crisis de México se originó, no sólo por el fracaso del modelo económico neoliberal, aplicado en los últimos 36 años, sino por el predominio, en este periodo, de la más impúdica corrupción pública y privada…Nada ha dañado más a México que la deshonestidad de los gobernantes y la pequeña minoría que ha lucrado con el influyentismo. Esa es la causa principal de la desigualdad económica y social y también de la inseguridad y la violencia que padecemos». Y en cuanto a la ineficiencia del modelo, probó con datos irrebatibles que ni siquiera en términos cuantitativos ha dado buenos resultados. Después de recordar que, desde los años 30 a los 70 del siglo pasado, la economía de México creció a una tasa promedio anual del cinco por ciento y que luego, entre 1970 y 1982, creció también a una tasa del seis por ciento, aunque con graves desequilibrios, es decir con inflación y endeudamiento; calificó el período transcurrido desde 1983 a la fecha -auge neoliberal- como la más ineficiente en la historia moderna de México. “En este tiempo, la economía ha crecido en dos por ciento anual. Y tanto por ello como por la tremenda concentración del ingreso en muy pocas manos, se ha empobrecido a la mayoría de la población hasta llevarla a buscarse la vida en la informalidad, a emigrar masivamente o a buscar el camino de las conductas antisociales. AMLO fue particularmente duro al juzgar la famosa reforma energética: “Nos dijeron que venía a salvarnos. Y sólo ha significado la caída en la producción de petróleo y el aumento desmedido de los precios de la gasolina, el diesel, el gas y la electricidad”. Precisó que cuando se aprobó esa reforma hace 4 años, se afirmó que se iba a conseguir inversión extranjera a raudales. El resultado es que apenas llegaron 760 millones de capital foráneo, el 1,9 por ciento de la incipiente inversión pública realizada por PEMEX en el mismo período y apenas el 0,7 por ciento de la inversión prometida. “Se aseguraba que este año íbamos a estar produciendo 3 millones de barriles diarios. La realidad es que estamos extrayendo 1 millón 763 mil barriles por día, 41 por ciento menos de lo estimado y con tendencia a la baja. “Es tan grave el daño causado al sector energético nacional que, no sólo somos el país petrolero que más gasolina importa en el mundo, sino que estamos importando crudo para las seis refinerías que sobreviven, porque desde hace 40 años no se construye una refinería en el país. Otros datos demoledores: De México es originario el maíz y somos la nación que más maíz importa. Autosuficientes en todo lo energético, México ahora compra más de la mitad de lo que consume. “El salario de los mexicanos es de los más bajos del planeta, tenemos el doble de enfermos de diabetes en comparación con países de América Latina. Durante el periodo neoliberal nos convertimos en el segundo país del mundo con mayor migración, viven y trabajan en Estados Unidos 24 millones de mexicanos y por lo que hace a la violencia estamos en los primeros lugares del mundo». “El distintivo del neoliberalismo es la corrupción. Suena fuerte, pero privatización ha sido en México sinónimo de corrupción, desgraciadamente casi siempre ha existido este mal en nuestro país, pero lo sucedido en el periodo neoliberal no tiene precedente. En estos tiempos, el sistema en su conjunto ha operado para la corrupción: El poder político y el poder económico se han alimentado y nutrido mutuamente y se ha implantado como modus operandi del robo de los bienes del pueblo y de las riquezas de la nación. La cuarta transformación A esa política de abuso y saqueo, sobre cuyos efectos se extendió mucho más en hora y media de discurso, López Obrador opondrá lo que ha definido como la Cuarta Transformación Política de México. «Puede parecer pretencioso o exagerado, pero hoy no sólo inicia un nuevo gobierno, hoy comienza un cambio de régimen político», afirmó con energía. «A partir de ahora se llevará a cabo una transformación pacífica y ordenada, pero al mismo tiempo profunda y radical, porque se acabará con la corrupción y con la impunidad que impiden el renacimiento de México». Y explicó en pocas palabras las tres grandes transformaciones de la historia mexicana: «en la Independencia se luchó por abolir la esclavitud y alcanzar la soberanía nacional; en la Reforma por el predominio del poder civil y por la restauración de la República; y en la Revolución nuestro pueblo y sus extraordinarios dirigentes lucharon por la justicia y por la democracia. Ahora nosotros queremos convertir la honestidad y la fraternidad en forma de vida y de gobierno». No gastaremos más de lo que ingrese a la Hacienda pública, se respetarán los contratos suscritos por los gobiernos anteriores pero ya no habrá más corrupción, influyentismo y

Nacionales, Opinion, Portada

Doble dependencia

Fuente: Horacio Verbitsky | El cohete a la luna Fecha: 02 de DIC 2018 Tanto la propuesta argentina inicial como el documento final consensuado fueron escritos con el manual de la corrección política. Detrás de ese catálogo de buenas intenciones persisten los conflictos del mundo realmente existente, como experimentó el presidente Maurizio Macrì cuando con ingenuidad se dejó involucrar por Trump en su conflicto con China. Su respuesta no es objetable: la Argentina ve la inversión china como una oportunidad, no como una amenaza. Pero no sale de la casa de muñecas de las palabras, donde con algo de maña y paciencia todo puede acomodarse. En la cena entre Trump y Xi Ji Ping al terminar la cumbre, el estadounidense ofreció suspender la elevación de tarifas del 10 al 25%  que pensaba imponer desde el 1° de enero a las importaciones chinas por valor de 200.000 millones de dolares, y su contraparte prometió aumentar las compras de energía y productos industriales y agrícolas estadounidenses. No fue un avance, pero evitó un fracaso, opinó el New York Times. Todo el mundo recibió con alivio esta tregua de 90 días, aunque las tensiones subsistan. El Grupo se autodefine como “el principal foro internacional para la cooperación económica, financiera y política” y es el lugar de encuentro de la Argentina con los poderosos del mundo. En realidad, es el escenario de las principales confrontaciones económicas, financieras y políticas, entre potencias que pugnan por apoderarse de la mayor porción posible de esos recursos, sobre dos ejes: la confrontación comercial de Estados Unidos con China, y militar con la Federación Rusa. A Macrì le fue mejor que a Justin Trudeau hace seis meses en Canadá, cuando Trump dejó la cumbre del G7 con insultos al joven anfitrión por sus desacuerdos comerciales; y que a la premier alemana Angela Merkel, hace un año, en Hamburgo, cuando no se firmó un documento de consenso y se exteriorizó la división 19 a 1, cuando Trump se negó a cualquier conciliación sobre el cambio climático, como prolegómeno al retiro de su país del Acuerdo de París. Y quedó años luz de distancia por encima de Macron, a quien se le incendió el país mientras asistía a la Cumbre. El cambio climático no es un tema menor. Hace apenas diez días, la comisión oficial estadounidense que coordina a 13 agencias federales publicó un informe literalmente aterrador, que enumera las catástrofes ambientales ya producidas y advierte las que se avecinan, en plazos que se acortan en forma dramática. Sus principales conclusiones: el calor extremo se generaliza; esto provoca cada vez mayor cantidad de espantosos incendios; la elevación del nivel del mar impondrá migraciones masivas y las ciudades costeras no se están preparando como se debe. En el caso de Canadá, los 180 días transcurridos permitieron que una trabajosa negociación acotara los daños y se llegara a una reformulación del Tratado de Libre Comercio de Norteamérica (el NAFTA por su sigla en inglés) que se firmó ahora en Buenos Aires. Pero aún falta la ratificación por los tres congresos, que dista de ser obvia. A contramano Para Macrì la doble dependencia de Estados Unidos y de China es un problema complejo. La cumbre sólo lo puso en primer plano. Desde que asumió, su agenda de apertura y desregulación colisionó con el movimiento opuesto de Trump, de cuyo sostén precisa en forma desesperada para llegar con algún oxígeno financiero al fin de su mandato, dentro de un año y una semana. Pero también necesita de las inversiones y los préstamos de China, cuya impetuosa presencia es la principal preocupación de seguridad nacional de Estados Unidos en esta parte del mundo. El intento de conciliar posiciones, como “mediador de buena fe”, es estimable y la presencia como sherpa argentino del ex vicecanciller de Susana Malcorra, Pedro Villagra, una rara muestra de buen sentido en un gobierno que se caracteriza por lo contrario. No obstante, se necesita algo más que la capacidad de un funcionario de segunda línea de un país de tercera para satisfacer al mismo tiempo las apetencias y requerimientos contradictorios de las dos mayores potencias del mundo, embarcadas en una guerra que Mónica Peralta Ramos describe en otra nota de esta edición. Trump y Macrì acordaron enfrentar la “economía predatoria” que atribuyeron a China, según el comunicado oficial de la vocera estadounidense Sarah Huckabee Sanders, publicado en el sitio de la embajada en Buenos Aires. Primero el embajador en Beijing, Diego Guelar; el ministro y el viceministro de Hacienda, Nicolás Dujovne y Miguel Braun; el canciller Jorge Faurie y por último el propio Macrì, negaron que la Argentina hubiera asentido a esa calificación de Trump. Faurie lo hizo a su manera, tenuemente. Guelar dijo que China es “un socio estratégico integral de la Argentina”, con el que durante la visita de Estado de Xi Jinping se firmarían 37 acuerdos bilaterales. La embajada levantó el comunicado de su página, lo mismo hizo la Casa Blanca y Trump no volvió a mentar el tema. Braun directamente afirmó que se trató de una declaración del gobierno de Estados Unidos y que China era el segundo socio comercial de la Argentina. Macrì añadió que la Argentina mantenía buenas relaciones con todas las naciones. De Estados Unidos dijo que era el primer inversor externo; de China, que Xi Ji Ping era fanático del fútbol, del vino y de la carne. Es decir, nada. Según la crónica del Washington Post, el gobierno de Trump considera a este “predador económico como una potencia hostil que busca socavar la supremacía tecnológica de los Estados Unidos y desalojar a Washington como la potencia global dominante”. Tanto funcionarios estadounidenses como chinos hablan en forma abierta de “una nueva Guerra Fría entre ambos países”. La economía predatoria china es la misma expresión que usó el jefe del Pentágono, general John Mattis, durante su visita de agosto a Brasil y la Argentina. Advirtió que los países de la región podían perder ciertos grados de soberanía, mediante regalos o préstamos chinos que luego sea imposible devolver y den lugar a condiciones

Scroll al inicio