Editorial
La historia de la impunidad de los genocidas arranca con la pretendida autoamnistía de Bignone. Pero para no irnos demasiado lejos en el tiempo, retomemos el hilo con “el curro de los derechos humanos” de Macri. Apenas asumido el gobierno de Cambiemos intentaron instalar —por decreto— dos jueces amigos en la Corte Suprema. Ante el rechazo generalizado, buscaron otro camino: el apoyo de los senadores que juegan el papel de “opo-oficialistas”. Mientras, desmantelaron los programas de DD.HH. en todos las dependencias oficiales y dejaron huérfanos de apoyo a los fiscales y querellas en los juicios a los represores. Recibieron en audiencia a los defensores de los genocidas y también a partidos neonazis dando vida, una vez más, a la infame teoría de los dos demonios. Luego siguieron las provocaciones negacionistas de Lopérfido y Gómez Centurión para ir pavimentando el camino. En tanto, la Corte jugaba su propio partido. Dictó un fallo favorable a la prisión domiciliaria de un represor, no reconoció un fallo de la Corte Interamericana de DD.HH. señalando que sus fallos prevalecen sobre los de esa instancia, violando así los tratados internacionales obligatorios según la letra de nuestra Constitución. De este modo, fueron armando el escenario de impunidad para dictar este último fallo canalla de la aplicación del 2×1 a los genocidas. Todo este recorrido fogoneado por sucesivos editoriales de la “tribuna de doctrina” de La Nación y los demás medios hegemónicos. ¿Quién es el funcionario del gobierno que ha salido en cada oportunidad a defender cada una de estas acciones? Nuestro conocido e inefable Secretario de Derechos Humanos Claudio Avruj. Pero lo peor de esta defensa es que ha llegado a ponerse al lado de los negacionistas para lo cual hasta llegó a cuestionar la cifra de 6.000.000 de masacrados por el nazismo y a ponerse al lado de los genocidas al decir que apoyaba el fallo, a lo que no se animó el ministro de Justicia Garavano y algunos otros funcionarios del gobierno. Cuando se percató que lo dejaron solo en compañía de Cecilia Pando y del intendente fascista de Mar del Plata, se sumó al día siguiente al discurso oficial. Decididamente patético. Su ex empleadora, la DAIA, guarda un estruendoso silencio. ¿Se hubiera mantenido así, en silencio, ante leyes iguales que se hubieran dictado para favorecer a los criminales de guerra nazi? Una vergüenza. Las cuestiones técnicas relacionadas con la decisión de la Corte son abordadas en varias notas de este Boletín. Pero lo que hay que tener en cuenta es que, si bien es importante desmontar la falacia jurídica del 2×1, el fallo es esencialmente político. Y es en ese campo donde hay que dar la batalla, y con la gente en la calle. Ya nos pasó con las leyes de Obediencia Debida, Punto Final y la amnistía y se pudo superar con lucha. Por eso el LLAMAMIENTO convoca a la Plaza de Mayo a repudiar a la Corte y contra la impunidad de los genocidas. Actividades del LLAMAMIENTO El 29 de abril celebramos Pesaj/Peisaj con un séder que colmó la capacidad del salón. Un grupo de compañeros preparó una Hagadá en la cual se resignificó el mito/relato fundacional de la identidad judía desde una óptica humanista, encontrando los puntos de contacto entre la liberación de la esclavitud en Egipto con las luchas por la liberación nacional, social y económica de nuestra época. El próximo viernes 12 de mayo a las 19.30 hs. se llevará a cabo una charla con la participación de Sergio Burstein y Horacio Lutzky quienes abordarán el estado de las causas sobre los atentados a la Embajada de Israel y la AMIA y la del encubrimiento. Tendrá lugar en “La Cacerola”, a las 19.30 hs. En Franklin 26, CABA.