Comunicados y Declaraciones

Comunicados y Declaraciones

Repetimos lo mismo que ayer: “No en nuestro nombre”

El LLAMAMIENTO Argentino Judío repudia enfáticamente el documento elaborado por la Foro de Convergencia Empresarial en apoyo a la política tarifaria del gobierno macrista, medida que afecta a la mayor parte del entramado social de nuestro país, y en especial a los sectores más vulnerables. El Foro está integrado, entre otros, por la Asociación Empresaria Argentina (AEA), la Unión Industrial Argentina (UIA), la Sociedad Rural Argentina (SRA), la Asociación de Bancos de la Argentina (ABA), las Bolsas de Comercio y de Cereales de Buenos Aires, la Cámara de Comercio, la AMIA y la DAIA. Dado que la DAIA y la AMIA aparecen como signatarios del Foro de Convergencia Empresarial y que no han repudiado su inclusión entre los firmantes del posicionamiento, justifican una vez más nuestros constantes señalamientos relativos a sus actitudes de genuflexión hacia los más poderosos, sus identificaciones con los sectores antipopulares de la derecha, y la renuncia a sus objetivos fundacionales relacionados con en el combate al nazifascismo, el antisemitismo, la xenofobia, el resguardo de los derechos humanos y la ayuda social. Cuando el LLAMAMIENTO hizo su aparición pública tres años atrás, señalamos que hablábamos “con voz propia”, que la DAIA y la AMIA no nos representaban, situación que compartimos con una creciente porción de la colectividad argentino-judía. La deriva conservadora de la DAIA y la AMIA se fue acentuando a partir del triunfo de Cambiemos en el 2015, cuyo gobierno lleva adelante una política de restauración neoliberal, que implica un avance sobre todas las conquistas populares. Esta deriva supone la continua destrucción del Estado de Derecho y su institucionalidad democrática. Esta es la razón por la que los integrantes del LLAMAMIENTO nos preguntamos retóricamente: ¿Qué tienen que hacer la DAIA y la AMIA en el seguidismo a organismos empresariales que expresan lo más concentrado del capital industrial, los terratenientes, las cerealeras y los bancos extranjeros? ¿Qué tiene que ver ese posicionamiento con los principios fundantes de su creación? ¿Acaso los judíos que participan de sus instituciones adheridas no son —en su inmensa mayoría—, trabajadores, profesionales, pequeños comerciantes e industriales pymes que sufren como la mayoría del pueblo argentino la agresión del brutal tarifazo? Otra vez, como lo hicimos en nuestra fundación tres años atrás, nos vemos en la obligación de expresarnos y de advertirle a la sociedad: “NO EN NUESTRO NOMBRE”   Buenos Aires, 3 de mayo de 2018    

Comunicados y Declaraciones

Juicio por encubrimiento, crónica de una traición anunciada

El LLAMAMIENTO Argentino Judío repudia la conducta de la querella unificada de la DAIA y de la AMIA en su alegato en el denominado “juicio por encubrimiento” contra trece imputados que se está desarrollando en el Tribunal Oral Federal N° 2. De los dos tramos de acusaciones, en el que se hace referencia a la entrega de 400 mil dólares a Carlos Telleldín (con el objeto de fraguar el involucramiento de policías bonaerenses) la DAIA y la AMIA consideran que los acusados —entre otros, el expresidente de la DAIA Rubén Beraja y los exfiscales Eamon Müllen y José Barbaccia— actuaron “de buena fe”, lo que convierte al delito en apenas una irregularidad, pero no en una conducta “reprochable penalmente”. Con esos falaces razonamientos jurídicos ambas instituciones solicitaron la absolución de todos los involucrados en la entrega del dinero y en el caso puntual del expresidente de la DAIA utilizaron el espurio argumento de antisemitismo, considerando que a Beraja lo acusan en tanto su condición de judío y, además, para ensuciar “a la comunidad”. Una vez más la auto-victimización se utiliza para justificar la conducta de quien, en realidad, traicionó a las víctimas del atentado y a sus familiares a los que tenía la obligación de defender. En el segundo tramo del juicio, vinculado a la llamada “pista siria” como probable fuente del atentado, la querella DAIA-AMIA consideró culpables a los acusados –Carlos Menem, Juan José Galeno, Juan Anchezar, Carlos Castañeda y Jorge “Fino” Palacios— y los señala como responsables de desviar la investigación cuando un allegado al expresidente de la Nación, de ascendencia siria, fue señalado como sospechoso de estar involucrado en el atentado. Por esa “desviación” la querella conjunta pidió penas para los acusados. Sin embargo, resulta extraña y amañada esta conducta de la DAIA-AMIA ya que durante años acusó a quienes  impulsaban la “pista siria” como responsables de querer desviar la investigación e impulsaron la “pista iraní”, la única que les interesaba, por mandato de las embajadas de Estados Unidos e Israel. Consideramos que la actitud de la AMIA-DAIA implica una traición anunciada. El agravante es que desde el inicio de las pesquisas, la dirigencia comunitaria profundizó su viraje a la derecha identificándose hoy sin tapujos con el proyecto restaurador del actual gobierno. La única diferencia entre los dirigentes del gobierno y los de la DAIA-AMIA es que unos descansan el domingo y los otros el sábado. El LLAMAMIENTO Argentino Judío, además de condenar la conducta de la DAIA-AMIA en relación con el “juicio por encubrimiento”, reafirma su solidaridad con los familiares de las víctimas del atentado y se compromete en acompañarlos en su lucha por VERDAD Y JUSTICIA. Para que los muertos puedan, de una vez por todas, descansar en paz.  

Comunicados y Declaraciones

Una reflexión en torno al aniversario de Israel

El LLAMAMIENTO Argentino Judío comparte la reflexión del escritor e intelectual israelí David Grossman en relación con el 70 aniversario del Estado de Israel. Grossman, quien ha sido galardonado recientemente con el Premio Israel de Literatura, es uno de los numerosos padres y madres israelíes y palestinos que han perdido a un hijo o una hija en un conflicto fratricida que incluye guerra, terrorismo y ocupación, y que lleva ya siete décadas, el mismo tiempo de la existencia de ese Estado. El Llamamiento hace suyas las sensibles palabras de Grossman, quien señala y advierte acerca del único camino posible para lograr la paz entre los dos pueblos. *** Queridos amigos, buenas noches Hay mucho ruido y conmoción alrededor de nuestra ceremonia, pero no olvidemos que por sobre todo esta es una ceremonia de recuerdo y comunión. El ruido, incluso si está presente, está en este momento más alejado de nosotros, porque en el corazón de esta noche nos envuelve un profundo silencio: el silencio del vacío creado por la pérdida. Mi familia y yo perdimos a Uri en la guerra, un hombre joven, dulce, inteligente y divertido. Casi doce años después todavía me es difícil hablar de él en público. La muerte de un ser querido significa en realidad también la muerte de una cultura privada, completa, personal y única, con su propio lenguaje especial y su propio secreto, y nunca volverá a existir, ni habrá ninguna como esta. Es indescriptiblemente doloroso enfrentar ese «no» decisivo. Hay momentos en los que ese «no» casi absorbe todo el «tener» y todo el «sí». Es difícil y agotador luchar constantemente contra la gravedad de la pérdida. Es difícil separar la memoria del dolor. Me duele recordar, pero es aún más aterrador olvidar. Y qué fácil es, en esta situación, ceder ante el odio, la ira y la voluntad de venganza. Pero me doy cuenta que cada vez que me tientan la rabia y el odio, de inmediato siento que estoy perdiendo el contacto vivo con mi hijo. Algo está sellado. Y así llegué a mi decisión, hice mi elección. Y creo que aquellos que están aquí esta noche, hicieron la misma elección. Y sé que dentro del dolor hay también aliento, creación, el hacer el bien. Ese dolor no aísla sino que también conecta y fortalece. Aquí, incluso los viejos enemigos, israelíes y palestinos, pueden conectarse entre sí más allá del dolor e incluso por causa de él. He conocido bastantes familias en duelo en estos últimos años. Basado en mi experiencia les he dicho, que incluso viviendo en medio del dolor, deben recordar que a cada miembro de la familia se le debe permitir llorar de la manera que quiera, tal como es y de la forma en que su alma le dice que lo haga. Nadie puede indicarle a otra persona cómo llorar. Eso es válido para una familia privada, y lo es para la extensa «familia en duelo». Hay un sentimiento fuerte que nos conecta, una sensación de destino común, y el dolor que solo nosotros conocemos, para el cual casi no hay palabras, allá afuera donde brilla la luz. Es por eso que, si la definición de «familia en duelo» es genuina y honesta, por favor respeten nuestro camino. Merece respeto. No es un camino fácil, no es obvio, y no está exento de contradicciones internas. Pero es nuestra manera de dar sentido a la muerte de nuestros seres queridos, y a nuestras vidas después de su muerte. Y es nuestra forma de actuar, de hacer, no de desesperar y no de desistir, para que un día, en el futuro, la guerra se desvanezca y tal vez cese por completo, y comencemos a vivir, vivir una vida plena y no solo subsistir de guerra en guerra, de desastre en desastre. Nosotros, israelíes y palestinos, que en las guerras entre nosotros hemos perdido lo más caro, más caro quizás que nuestras propias vidas, estamos condenados a enfrentar a la realidad a través de una herida abierta. Aquellos así heridos ya no pueden fomentar ilusiones. Los así heridos saben en qué medida la vida se compone de grandes concesiones, de un compromiso sin fin. Creo que el dolor nos convierte, a los que estamos aquí esta noche, en personas más realistas. Vemos con claridad, por ejemplo, todo lo relacionado a los límites del poder, a las ilusiones que siempre acompañan a aquel que sustenta el poder. Y ahora somos más cautelosos, más de lo que éramos antes del desastre, y nos llenamos de odio cada vez que detectamos una exhibición de orgullo vacío, o eslóganes de nacionalismo arrogante, o declaraciones prepotentes de los líderes. Somos más que cautelosos: somos prácticamente alérgicos. Esta semana Israel celebra 70 años. Espero que podamos celebrar muchos años más y muchas más generaciones de hijos, nietos y bisnietos lo hagan, viviendo aquí junto a un estado palestino independiente, en forma segura, pacífica y creativa, y lo más importante, en una serena rutina diaria, en buena vecindad; y sintiendo que éste es su hogar. ¿Qué es un hogar? El hogar es un lugar cuyas paredes, sus fronteras, están definidas y son aceptadas; cuya existencia es estable, sólida y sosegada; cuyos habitantes conocen sus códigos íntimos; cuyas relaciones con sus vecinos se han resuelto. Un lugar que proyecta un sentido de futuro. Y nosotros los israelíes, también después de 70 años, y no importa cuántas palabras salpicadas de miel patriótica sean pronunciadas en los próximos días, aún no hemos llegado allí. Todavía no estamos en casa. Israel se estableció para que el pueblo judío, que casi nunca se sintió en casa en ningún lugar del mundo, finalmente tuviera un hogar. Y ahora, 70 años más tarde, puede ser que la poderosa Israel sea una fortaleza, pero aún no es un hogar. La solución a la compleja relación entre israelíes y palestinos se puede resumir en una breve fórmula: si los palestinos no tienen un hogar, los israelíes tampoco lo tendrán. Lo opuesto también es cierto: toda

Comunicados y Declaraciones

Biondini, el «führer» argentino

El LLAMAMIENTO Argentina Judío expresa su repudio a las manifestaciones de Alejandro Biondini, quien señaló en el día de ayer que “Solo el día que el Estado de Israel sea borrado del mapa habrá paz en Medio Oriente”. La afirmación actualiza una vez más el consabido carácter nazifascista de quien repetidamente se ha auto-erigido como el “führer” argentino y problematiza la legitimación otorgada por el juez Ariel Lijo, quien le otorgó la autorización jurídica a su partido Bandera Vecinal para constituirse en partido político reconocido. Las provocaciones de Biondini  actualizan, además, la escandalosa recepción que merecieron los dirigentes de Bandera Vecinal por parte del gobierno de Cambiemos en la Casa Rosada a mediados de 2016. El LLAMAMIENTO condena dicha fraseología que instiga al genocidio y advierte que no existe ninguna solución a los conflictos —en ese caso de Medio Oriente— que se sustente en la “desaparición”, la guerra, la ocupación o la instigación a “borrar del mapa” a un colectivo humano, sea éste palestino, afgano, coreano, sirio o israelí. El LLAMAMIENTO considera que las convocatorias a «destruir» son parte del lenguaje, estilo y conducta de quienes privilegian la guerra por sobre la resolución pacífica de los conflictos, en el marco de negociaciones respetuosas de las soberanías nacionales. La provocación de Biondini posee la misma «racionalidad» utilizada por los EEUU, el Reino Unido y Francia para justificar sus criminales bombardeos a Siria. Las “soluciones finales”, las guerras, las persecuciones, las amenazas de exterminio y todas las fraseologías asociadas a ellas no son más que el producto de la antigua costumbre nazi de regodearse en la opresión y la muerte, sus dos formas preferidas de comportamiento histórico. Buenos Aires, 17 de abril de 2018

Comunicados y Declaraciones

Wolff no contesta

Hace una semana el LLAMAMIENTO Argentino Judío publicó en las redes una declaración, titulada “Mosad y antisemitismo, una confusión”. En la misma se expresaba nuestro desacuerdo con los argumentos por los cuales el juez Sergio Torres procesó al diputado radical alfonsinista, integrante de Unidad Ciudadana, Leopoldo Moreau. La denuncia que motivó el auto de procesamiento fue originada en una presentación de su par, Waldo Wollf, integrante de la bancada de Cambiemos y exvicepresidente de la DAIA. La declaración del LLAMAMIENTO fue publicada el 10 de abril y puede ser consultada en Facebook, Twitter, Telegram, etc. (https://bit.ly/2JRwbxY) (bit.ly/2EBnyUe ) Más allá de las graves confusiones que sustenta la denuncia y el consecuente dictamen del juez, aparece como indudable la espuria victimización que hace Wolff y su malversación de términos como “judío”, “israelí”,“extranjerización” y “antisemitismo”. Luego de la difusión del posicionamiento crítico del LLAMAMIENTO el diputado de Cambiemos contestó irónicamente vía Twitter, en tono coloquial: “Gracias hermanos. No esperaba otra cosa de ustedes. Ya me difamaron diciendo que recibía ordenes de Singer, se solidarizaron con D´elia que viajó a Iran a verse con Hezbolla y ahora con Moreau procesado por incitación al antisemitismo. Que sigue? Romper mis vidrios? Abrazo.” (SIC) La sorna empleada por legislador aparece como una buena oportunidad para invitarlo a un debate público abierto, en el cual ahondaremos –entro otros temas posibles— sobre los ejes planteados por el legislador y que respondimos en nuestro Twitter: 1 Wollf: Asociamos a la DAIA con Singer porque coincidían en el ataque al gobierno popular de Argentina. 2 Repudiamos la prisión de TODOS los presos políticos, incluso D’Elia, pero NO felicitamos a D’Elia por sus vínculos con Irán. De hecho no compartimos esos nexos. 3 Repudiamos su auto-victimización y su acusación contra Moreau porque que es una utilización espuria de una temática sensible para nosotros, la judeofobia. 4 Y como NO ROMPEMOS VIDRIOS sino que confrontamos ideas lo invitamos a un DEBATE PÚBLICO Y AMPLIO. SR WOLFF ponga usted día, hora y lugar. Aún esperamos una respuesta del señor Wolff.                                                                                                                                  Buenos Aires, 17 de abril de 2018

Comunicados y Declaraciones

Mosad y antisemitismo, una confusión

  El LLAMAMIENTO Argentino Judío expresa su desacuerdo con los argumentos del procesamiento dictado por el juez Sergio Torres contra el diputado Leopoldo Moreau en la denuncia presentada por el diputado Waldo Wolff, dictamen encuadrado en la ley 23.592  antidiscriminatoria. En el mismo se incurre en una serie de confusiones sobre antisemitismo, nacionalidad, ciudadanía, identidad judía, que lo llevan a ordenar un procesamiento carente de sustento. Hoy se ha convertido en un lugar común que cualquier crítica a la política exterior del Estado de Israel se convierta en una acusación de antisemitismo. Toda crítica — correcta o no— recae en el ámbito de la libertad de expresión. Sólo “Quien arbitrariamente impida, obstruya, restrinja o de algún modo menoscabe el pleno ejercicio sobre bases igualitarias de los derechos y garantías fundamentales reconocidos en la Constitución nacional,…” (Ley 23.592) incurren en un acto discriminatorio y racista. Y el caso del diputado Moreau, a todas luces, no encuadra dentro de lo judiciable. Esa tendencia se traslada también a la crítica al comportamiento político de la dirigencia de la DAIA que exterioriza un pensamiento de derecha o que participa activamente en la persecución judicial de funcionarios del gobierno anterior. Cuando se la cuestiona, en lugar de ampararse en el derecho de opinión, se victimiza alegando “antisemitismo”. En este marco general hay que ubicar el fallo del juez Torres que dice textualmente “…el día 2 de noviembre de 2017, en el programa televisivo MINUTO UNO del canal C5N, conducido por el periodista GUSTAVO FABIÁN SYLVESTRE, (Moreau) manifestó ‘…ahora están haciendo una sobreactuación, a través de Wolff y otros agentes del Mossad en la Argentina, que son los que están llevando adelante toda esta campaña de difamación…’. Así, identificó al diputado WALDO WOLFF como un agente del Mossad con el objeto de extranjerizarlo por su religión judía”. La sobreactuación se refería al rol de Wolff y otros en la reapertura de la causa iniciada por el exfiscal Alberto Nisman por encubrimiento por la firma del memorándum con Irán y en las persecuciones y difamaciones contra los acusados, jueces y camaristas que desestimaron la acusación por inconsistente. El Mosad es el servicio de inteligencia exterior del Estado de Israel, como la CIA el de EE.UU. Sus agentes e informantes los recluta en países extranjeros y pueden ser judíos o no. ¿Cómo llega el juez a afirmar en su fallo que la acusación contra el diputado Wolff de ser un agente del Mosad tiene como “objeto extranjerizarlo por su religión judía”? Nadie por su religión se convierte en extranjero. No cabe duda que el magistrado acepta la línea de victimización falaz de la dirigencia de la DAIA. El Mosad no es el servicio de inteligencia de la religión judía, sino del Estado de Israel. Es un organismo del Estado cuya actividad, se supone, tiene que ver con prestarles servicio a los israelíes y no a los judíos que habitan otros países del mundo. Su condición de judío no convierte a Wolff en ciudadano israelí, sigue siendo ciudadano argentino. En la confusión en que incurre el juez Torres se mezclan conceptos y categorías distintas. Se confunde judío con israelí, nacionalidad con religión, crítica con antisemitismo y discriminación, identidad judía con religión judía. Y esta confusión es la que da sustento a la acusación. Por otro lado, rechazamos el aprovechamiento que el diputado Wolff hace de esta confusión y su accionar jurídico contra su par Leopoldo Moreau que en vez de confrontar con argumentaciones no hace más que judicializar los contenidos de un debate naturalmente político y pone como escudo amañado su condición de judío. El LLAMAMIENTO Argentino Judío manifiesta su desacuerdo con el dictamen judicial y nos solidarizamos con el diputado Leopoldo Moreau, esperando que las instancias superiores revisen esta errónea decisión.

Comunicados y Declaraciones

En relación a los sucesos en Gaza

El LLAMAMIENTO Argentino Judío denuncia la cruel represión contra manifestantes palestinos concentrados en la frontera que separa la Franja de Gaza e Israel. El LLAMAMIENTO expresa una vez más su convicción de que el único camino viable para la necesaria Paz es la aceptación de dos Estados para dos Pueblos con todos los atributos de la soberanía que eso supone para ambas entidades estatales, en el marco de las fronteras previas a 1967. El repudio de la brutal represión se suma a la exigencia de la comunidad internacional de ponerle inmediato fin a la ocupación y a las prácticas coloniales que se instituyen en los territorios palestinos de Cisjordania y al bloqueo inhumano de Gaza. El LLAMAMIENTO reitera su convicción de que la Paz solo podrá ser el resultado del establecimiento de fronteras seguras y la condena de todo tipo de fundamentalismo proveniente de doctrinas religiosas o nacionalistas. Buenos Aires, 1 de abril de 2018

Comunicados y Declaraciones

Convocamos a repudiar la ley negacionista polaca

Convocamos a repudiar la ley negacionista polaca Y LA DENUNCIA CONTRA PÁGINA 12 Llamamos a todas a las organizaciones de Derechos Humanos, a la dirigencia política nacional, a todos los colectivos sociales y a la colectividad judía toda a acompañar al LLAMAMIENTO Argentino Judío en la entrega a la Embajada de Polonia en la Argentina de una Carta de Rechazo y Repudio a la ley recientemente sancionada en ese país para enjuiciar y sancionar la sola mención de la participación polaca en el exterminio de millones de judíos y otras minorías en el Holocausto, lo que constituye un agravio a la condición humana y un intento de rescribir la historia. Además, significa una ofensa a aquella polacos que ocultaron y salvaron a sus compatriotas judíos arriesgando su vida frente a la cacería nazi, borrando así toda diferenciación con los que colaboran con el ocupante. En tanto, la denuncia judicial contra el diario Página 12 por la publicación de una nota periodística relatando hechos criminales llevados a cabo en suelo polaco —y por ciudadanos polacos— durante la Segunda Guerra Mundial, constituye un serio menoscabo a la libertad de prensa y una farsa inaceptable. En el LLAMAMIENTO Argentino Judío tenemos la firme convicción de que el repudio no puede ni debe ser sólo discursivo. Como herederos de un pueblo y de un acervo cultural que la bestia nazi intentó borrar, alzamos nuestra voz frente al intento de ocultar y silenciar la barbarie. Los argentinos TODOS experimentamos los efectos de la ideología emparentada con el nazismo y puestas en práctica por la dictadura genocida que despareció a 30.000 compatriotas. Es por eso, y por el avance preocupante de expresiones xenófobas al amparo de “democracias” neoliberales, que debemos expresarnos con firmeza y en unidad. MIÉRCOLES 14 DE MARZO A LAS 14 HS EN LA PUERTA DE LA EMBAJADA DE POLONIA EN BUENOS AIRES – CALLE ALEJANDRO MARÍA DE AGUADO 2870 – CABA

Comunicados y Declaraciones

Un encuentro Manifiesto

El LLAMAMIENTO Argentino Judío, decididamente involucrado en el intenso transcurrir de la política, continúa con sus habituales encuentros con los protagonistas de la escena nacional. Lo que podría haber sido un formal “desayuno” o “almuerzo” de trabajo, por esas alquimias de coyuntura, se transformó en una distendida “cena-tertulia” con Mempo Giardinelli y Alejandro Mosquera miembros de la conducción política del MANIFIESTO ARGENTINO.  El encuentro se formalizó a principios de esta semana y por el LLAMAMIENTO participaron Jorge Elbaum, Marcelo Horestein y Larry Levy. La charla tuvo como eje la situación política y económica bajo el gobierno de Cambiemos y las posibles formas de militar la oposición contra embate neoliberal. Uno de los temas relevantes del encuentro fue la iniciativa del Manifiesto —quizás la más conocida— sobre la propuesta de redacción de una profunda Reforma Constitucional. Las inquietudes expresadas en la mesa constituyeron carriles de doble sentido. Mempo puso en juego —además de su innato “ser político”— su condición de escritor y periodista y rompió con la formalidad. Preguntó y ahondó con acertivo interés sobre la “interna” judía. Del lado del LLAMAMIENTO la inquietud estuvo puesta —entre otras— en la forma de expansión territorial del MANIFIESTO. La tertulia incluyó un desestructurado análisis de la situación política nacional y regional, el desastroso desempeño de la economía, la desequilibrada distribución de la riqueza y el Gobierno conculcando derechos. La construcción de espacios políticos y la formación de una amplia y eficaz oposición ocupó buena parte del intercambio. Para Mempo resulta importante erradicar algunos términos del lenguaje político. “Alianza” y “frente” —asegura— devienen de experiencias frustradas y frustrantes. Prefiere usar la palabra “confluencia” para ampliar el espectro de la concertación. Pero además del lenguaje, la propuesta es que esa confluencia se base en un ideario, en una sana enunciación de postulados y no en una negociación o puja de butacas en el palco de la política. Sobre el final, con el café, la atención se posó sobre la problemática de los medios y la forma de comunicar. Qué y cómo usar las nuevas tecnologías para llegar a los receptores de nuestros mensajes atravesando el cerco mediático de los medios hegemónicos. Todo un desafío que exige un pensamiento estratégico adicional. La “tertulia” se cerró con el compromiso de regularizar los contactos y ampliarlos en áreas comunes de incumbencia.   23 de febrero 2018

Scroll al inicio